Cuanto más complejas y variadas son las relaciones humanas mayor es la repercusión que pueden tener en la notaría.
- Matrimonio
- Pareja de hecho
- Régimen económico matrimonial
- Separación
- Divorcio
- Negocios entre cónyuges
Tener una pareja implica ponerse en relación con otra persona, de una forma estable. Ese vínculo genera distintas situaciones que tienen transcendencia jurídica que pueden hacer necesaria o aconsejable la visita al notario, con independencia de cual sea tu modelo de convivencia elegido.
“¿Estas casado?” Es una pregunta relativamente frecuente, sin embargo, no todas las personas que responden estar casadas lo están realmente ni todas las que dicen no estarlo se refieren a lo mismo. ¿Sabéis que no es lo mismo estar casado que tener constituida una pareja de hecho? ¿Qué no es lo mismo tener una unión de hecho formalizada que vivir con tu pareja?
Cada situación tiene unos efectos jurídicos específicos que no siempre coinciden con lo que pensamos o queremos.
En este apartado encontraréis información sobre los servicios notariales relacionados con la formalización de un vínculo matrimonial o no con tu pareja. Tanto si quieres casarte, como si decides formalizar una pareja de hecho o simplemente convives con otra persona mientras decidís dar un paso hacia la formalización de vuestra relación os interesa tener en cuenta la información que aquí te suministramos.
Con el paso del tiempo cada pareja, matrimonial o no, escribe su propia historia, hay quienes deciden formalizar su pareja, constituyendo una pareja de hecho, otras personas, después contraen matrimonio. Sin embargo, no todas las historias tienen el mismo final, también es posible que sobrevenga una crisis de pareja y se plantee una separación de hecho, una separación legal o un divorcio.
Más allá de la formalización, o no, o de la extinción de un vínculo, decidir ligar tu vida a la de otra persona no solo es una cuestión personal o de sentimientos, también tiene unos efectos económicos. En caso de matrimonio, se genera un régimen económico matrimonial, el cual tiene sus efectos específicos y da lugar a que se puedan llegar a celebrar negocios entre cónyuges.
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